23 abril 2011

COMPRENDIENDO LA SEMANA SANTA

En esto del caminar hacia mejorarse a uno mismo, aprender el funcionamiento de las Leyes Universales, salirse del “plano de la lucha”; reconocernos como excelsos hijos de Dios, re- aprender el perdón, tanto para los demás como para sí, sin condiciones ni excusas , conlleva una tarea de dedicación tan profunda e importante , como no existe otra en la vida del ser humano. Para esto hemos venido realmente, para realizar la perfección, la maestría, en estos asuntos del espíritu, con relación a la vida en el mundo material que existimos.

Así mismo, en ese trayecto vivimos diferentes acontecimientos, cada uno con respectiva importancia y significado. Atravesamos muchas “NAVIDADES” momentos felices, al menos casi siempre, situaciones donde reinan la alegría, los regalos de la vida, los festejos, el momento de agradecer, de pronto llegan “ obsequios inesperados” , cual magia pareciera ser… un empleo mejor, una pareja nueva, la compra de una casa, la responsabilidad de llevar adelante la expansión de la luz en alguna ciudad lejana, abrir grupos, editar libros, en fin… regalos tan maravillosos como si se tratara de “Incienso, Oro y Mirra”.
Otras veces vivimos verdaderas “Noches de HALLOWEN” donde todo parece que se ennegrece, malas caras, malas actitudes, “ des-gracias”, es cierto que también estamos en calidad de comprender que es nuestra propia energía “Mal Calificada” que se nos devuelve, no tiene nada que ver con la suerte, o “las brujas”. Ya hemos empezado a transitar en el “ASPIRANTADO” y sabemos que hemos de redimir cada uno de los electrones que han salido de nosotros, para poder llegar más lejos en este camino de perfeccionamiento.
Y también llega a nuestras vidas la “Semana Santa” o “Pascuas”… dependiendo de la situación evolutiva en la que se encuentre el alma de cada persona, vivirá todos estos acontecimientos inconciente o concientemente, aunque llegará un momento en que nos haremos concientes del significado de todo esto.
Personalmente la “Semana Santa”, es de las etapas del año que más me llega, será porque la historia del MAESTRO JESÚS y toda su enseñanza de alguna manera, se resume e intensifica en estos días, y si nos ponemos a observar cada acontecimiento, Desde el Domingo de Ramos, el lavado de pies, la última cena, el Calvario, la Crucifixión, la vigilia, la Resurrección y el regreso del Maestro… podemos comprender muchas cosas de nuestra propia existencia.
Independientemente de que cada persona se dedique a atender una panadería, una peluquería, sea actor, actriz, jugador de fútbol, facilitador de Metafísica o editor de libros, etc, tiene siempre su “Domingo de RAMOS”, ese día en que todos le laurean, le alaban por el trabajo bien hecho, le esperan con los mejores convites, no hay defectos en nada, parece ser que uno es un “DIOS” y como tal es recibido.
Seguidamente, porque hornea panes exquisitos, o realiza peinados estupendos, hace goles de colores, interpreta a la perfección “Romeo y Julieta “, o bien sus clases son inigualables, y sus libros editados, los mejores, empiezan a invitarlo a cenas, comidas, “Bodas”, para remarcarle la “Fama” adquirida, además, porque los anfitriones son gustosos de sentirse importantes de contar con tan “ tan laureada estrella”.
Los más cercanos que conocen al personaje en cuestión, saben que todo esto un día acabará, y que es mejor tomárselo con calma, sobre todo aquellos que nos quieren y nos conocen bien, como puede ser nuestra madre.
Más tarde, los amigos cercanos, los hermanos de la vida, “los apóstoles”, se sienten felices de compartir cada paso del camino, quieren aprenderlo todo, para convertirse el día de mañana, en maravillosos “panaderos”, estilistas” Instructores” o Editores…
Por ello, el que hoy recibe los “Laureles”, les enseña gustoso, y les va explicando los recodos que pueden encontrar en el trayecto, y se posiciona como uno más, a la misma altura, y a veces un poco más abajo “lavando sus pies”, para que no olviden que mejor es estar cerca del suelo, ya que de ese lugar, jamás podremos caernos.
Un día, el que había entrado por la GRAN PUERTA, sabe que su momento se acerca, que ya es hora de partir, así que reúne a sus “cercanos” y organizando una gran cena, dedica sus últimas enseñanzas, aunque una gran pena invade su corazón, porque sabe que alguien le traicionará, alguien que seguramente quiere mucho, pero que no entendió que todos “podemos llegar” donde nos propongamos. Esa traición se vive día a día, una y otra vez, sucede para que desarrollemos algo muy necesario en el camino de perfeccionamiento: EL PERDÓN, si todos son muy buenos con nosotros, nunca aprenderemos a perdonar, por eso también demos las gracias, perdonemos de corazón y sigamos adelante.
Después aparecen las injurias, los falsos testimonios en nuestra contra, y quizás nuestra receta de pan es la misma, a lo mejor solo equivocamos una frase en la interpretación de la obra, pero de ser los mejores , pasamos a ser los peores, así que, hace a penas unos días entrábamos por la puerta grande, salíamos en la prensa , la gente nos “adoraba” y hoy, nos vapulean, nos insultan, nos llaman estafadores, nos traicionan aunque nos tachen a nosotros de traidores, hasta algunos de los más cercanos, tampoco están, nos quedamos solos, con nosotros mismos. Quizás solo nuestra madre, alguien que nos ama de verdad, y un verdadero amigo, se quedan hasta el final, arriesgándose a ser tachados de la misma manera.
Vivimos un verdadero “calvario”, nuestra propia “Cruz”, nos ponen con los peores, no vale la pena defenderse, ni resistirse, porque ello aumentaría la ira de los acusadores.
Solo nos queda perdonar y perdonar pero sobre todo y lo más importante es OBSERVAR, observar el propio interior, en cada uno de estos momentos, momentos que tenemos, tuvimos y tendremos a lo largo de nuestra evolución. Las primeras veces , cuando estamos aprendiendo, reaccionamos, calificamos, juzgamos, estamos ignorantes , cuando caminamos un poco más, y sabemos que la Verdad siempre sale a la luz, dejamos de defendernos, tenemos la conciencia tranquila y seguimos adelante, nos caemos una y otra vez, y volvemos a levantarnos , y a veces “alguien nos ayuda”…
“YO HAGO NUEVA TODAS LAS COSAS” enseñanza del Maestro Jesús tan profunda y cierta, Dios hace nuevas las cosas en nosotros cada momento, cada instante, soltemos el pasado, soltemos el lamento, la autocompasión y sigamos adelante, con quien quiera seguir adelante con nosotros.
El “Calvario” se acabará, como todo en la vida, “todo lo que tiene un principio, tiene un final”, “esto también pasará”, sea lo que sea se va a acabar, y empezará algo nuevo, nos dirán y harán cosas , que parecerán como clavos en nuestra piel, los propios pensamientos se revolucionarán cual espinas en nuestra frente, aquellos “latigazos” representan la incomprensión de los “incapaces de ver”, pero ninguna razón los hará entrar en razón, así que el silencio promete ser la mejor estrategia.
”Resurgiremos” de nuestras propias cenizas, comprenderemos por qué nos pasó cada cosa, sabremos que nada es gratis, que se nos devolvió lo que una vez salió de nosotros, el propio Maestro Jesús “pagó” por todos nuestros pecados, ÉL se hizo cargo de toda nuestra energía mal calificada. A cada uno de nosotros nos tocará, al menos, hacernos responsables de la nuestra.
No nos quejemos, pero tampoco nos creamos las alabanzas, Observemos cada cosa con ecuanimidad, como estamos aprendiendo, no reaccionemos ni al halago ni al insulto, démonos cuenta que todo es MAYA, Ilusión, si no nos “creemos” estar “tan arriba”, tampoco estaremos un día “tan abajo”, encontremos el punto medio en todo, y caminemos desapercibidos en la multitud, haciendo nuestro trabajo lo mejor que sabemos, sin creernos que ya lo hicimos lo mejor que podemos. Si la entrada no es tan majestuosa, no habrá tampoco un desgraciado Calvario, ni despertaremos la envidia de los más cercanos, y no sentirán necesidad de traicionar, sino todo lo contrario, querrán ayudar más y mejorarse ellos mismos.
Nos levantaremos airosos sobre nuestros propios errores, y animaremos a que otros lo hagan, dejaremos atrás el pasado y estaremos libres de prejuicios y expectativas.
Se hará la Pascua en nuestra vida, confirmando una vez más que por más oscura que pueda ser la noche, al siguiente día el Sol saldrá y brillará con más fuerza.

Meditemos en la semana santa, sobre todo en la de nuestras existencias.

FELICES PASCUAS
Rossana Fossatti
Vigo-Galicia

No hay comentarios.: